1 de Mayo en Berlín: la lucha anti-capitalista es más urgente que nunca
A pesar de las restricciones a las actividades y reuniones públicas producto de la Pandemia Covid-19, el primero de mayo en Berlín fue multitudinario y combativo. La convocatoria trazaba tres objetivos principales: manifestarse en contra de los responsables de la actual crisis capitalista, que afecta gravemente a los sectores populares, denunciar el racismo estructural de la sociedad alemana y mostrarse antagonista contra autoritarismo del Estado en la gestión de la Pandemia. Al mediodía más de 10.000 ciclistas ocuparon las calles de Grunewald, un barrio pudiente de mansiones y autos convertibles donde muchos viven con indiferencia frente a la pobreza, el alza de los alquileres, los desahucios, el trabajo precario y la situación de los migrantes y refugiades. Sobre las miles de bicicletas un mensaje claro: queremos el fin de la especulación inmobiliaria y viviendas dignas para todes. Además, el ambiente estaba caliente debido al rechazo por parte del Tribunal Constitucional Alemán a la ley propuesta por Berlín, de poner un límite o techo al precio de los alquileres.
Más tarde la cita era en la Hermannplatz, en el cruce de los barrios de Neukölln y Kreuzberg, conocidos por su tradición obrera y por la gran presencia de inmigrantes y juventud de izquierda. Este año la protesta fue significativamente mayor que en años anteriores y reunió a unas 20.000 personas en la march, la parte frontal de la columna estuvo formada por 19 organizaciones de migrantes aunados en torno la alianza antifascista Migrantifa. La jornada se mantuvo en clima festivo y de fervor popular durante casi 3 horas, con bailes, música y gritos por Palestina, por la solidaridad internacional de las luchas y pro los Pueblos Originarios de América Latina, hasta que la policía bloqueo la marcha y disolvió violentamente la concentración. Con el pretexto de que no se respetaba la distancia y el uso de mascarillas, el grupo de operaciones especiales, en una acción evidentemente premeditada, reprimió a les manifestantes sembrando el caos. El saldo final fue de más de 400 personas detenidas, destrozos en la vía pública y el descrédito ante la gente de la coalición gobernante “Grün-Rot-Rot” (Partido de los Verdes, Partido de la Izquierda y Partido Socialdemócrata), por su responsabilidad en la represión ejercida.
Para darle concepto a este día de lucha y memoria popular, Matraca conversó con Corsino Vela, obrero e intelectual, autor de diversos libros sobre lógicas capitalista y la lucha proletaria. Corsino procede de una familia obrera, al inicio los sesenta comenzó su actividad política participando en la CNT, el sindicato anarquista español. Hoy, 50 después, sigue vinculado a organizaciones de base, de trabajadores y a colectivos del ámbito libertario. En su último libro Capitalismo patológico, publicado este en 2021 por nuestros compañeres de la Librería Kaxilda de Donosti https://www.kaxilda.com. El autor utiliza la coyuntura de la Pandemia Covid-19 para explicar el aumento de la explotación, de la proletarización masiva, de la catástrofe ambiental y nos llama a “tomar otra vez nuestras vidas en nuestros manos”, más allá de la lógicas mercantiles de la sociedad capitalista. Con este llamado concreto, desde Matraca relanzamos el desafío anti-capitalista que contiene el 1 de mayo, recordando a todes les luchadores caídas en distintas partes del Mundo en la lucha por un mundo justo y una vida digna. Dedicamos a elles este programa, con la memoria en alto de las palabras de uno de los obreros “Mártires de Chicago”, que 1887 y antes de ser ejecutado en la horca, exclamó: “llegará el día en el que nuestro silencio será más poderoso que las voces que ahogáis hoy. Dejad que se escuche la voz del pueblo”.
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