Muy en la onda chicana de principios de los años setenta, Santa y su gente exploraron el sonido cool del latín rock abierto por bandas como Malo, Bandido y otras bandas chicanas por el estilo (eso sin mencionar a Santana). El resultado es un sonido a medio camino entre el funk aceitoso proveniente de la cultura musical negra y el edulcorado sonido de la muzak que invadiría las ondas radiales posteriores al golpe de estado.